Maribel, una de las voluntarias del colegio zaragozano Emilio Moreno Calvete, nos cuenta cómo han acercado la fruta a los peques a través de una actividad extraescolar.
«Las profesoras llevamos al Colegio la fruta cortada y preparada en platos, vasos, papel de aluminio… en esta clase contamos con unos 50 minutos de tiempo, por lo que hay que traer todo preparado para aprovecharlo al máximo.
Lo pusimos todo en una mesa central de forma atractiva y apetecible para los niños. Cuandollegaron a clase, fue una gran sorpresa para ellos, les alegró mucho ver tanta fruta y tanto colorido junto. Les explicamos la actividad entre el revuelo y alegría que mostraron.
Cada niño pensaría que podía hacer con las frutas y cogería lo necesario para crear su obra de arte. En cada mesa habíamos puesto platos, bandejas, cartulinas, cartones y los nombres de los niños en unos cartelitos.
En la mesa tenían cortado a rodajas, naranjas, peras, manzanas, sandía, limones, kiwis, zanahorias. Y también tenían tomates Cherry y uvas.
Fue realmente divertido ver como pensaban que hacer, que si peces con la sandía, mariposas, paisajes, abstractos, gusanos con limones… que si me hace falta un palito, que necesito algo pequeño para los ojos, que pongo la sandía como si sacara la lengua… le daban vueltas a las frutas y las iban colocando hasta ver su obra de arte de FrutaDivertida terminada.
Hicimos las fotos de cada obra de arte hecha con FrutaDivertida, los niños colocaron su tarjeta con el nombre que les habíamos dado y nos ayudaron a colocar el plato para que saliera bien la foto
Lo mejor llegó al final cuando nos preguntaron que si se lo podían comer, algo que hicieron todos con muchas ganas y saboreando cada bocado. A nosotras nos encantó ver a todos los niños comiéndose la fruta. Se comieron todo, hasta los limones. A mí me encanta el kiwi decía uno, otra niña decía que la sandía era su fruta favorita, el limón lo saboreaban y las naranjas fueron un éxito. Fue una actividad para repetir, desarrolló su creatividad y su gusto por la fruta.»
